Tus ojos, mis manos, y otros desiertos.

—«Hace más de trescientos poemas que no escribo la palabra horizonte. Por algo serás». 'Será', en "Pintura roja y papel de fumar".


 

_

_

_

La cubierta de un libro no es un cartón brillante,
sólo es la puerta de un jodido laberinto:
a veces hay que dejarse perder, otras,
es mejor dar un portazo y pillarse los dedos.

La tapa del libro es una suerte de balsa
para escapar de las tormentas de las islas desiertas,
o un bloque de cemento anudado a los zapatos.

Casi se parece más a la tapa de un ataúd.
Mejor aún: al tablón que cierra la caja
del viejo gato de Schrödinger, y todo su mecanismo
de incertidumbre.

_

gato

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Información

Esta entrada fue publicada el junio 5, 2016 por en Uncategorized.
Follow Tus ojos, mis manos, y otros desiertos. on WordPress.com

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

Únete a otros 490 suscriptores
A %d blogueros les gusta esto: