Tus ojos, mis manos, y otros desiertos.

—«Hace más de trescientos poemas que no escribo la palabra horizonte. Por algo serás». 'Será', en "Pintura roja y papel de fumar".


 

_

_

_

_________ LXV

_

Tengo un despertador de esos
que proyectan los dígitos de la hora
contra el techo.

_
No a todo el mundo le gustan. No todos
son capaces de soportarlos. Pero a mí,
esa luz roja me da cierta tranquilidad.

_
___________ Me dice cuánta noche me queda.

_
Hace unos días, justo a las tres
y cincuenta y siete, me desperté sobresaltado
por el ruído de la rítmica furiosa y acompasada
de una máquina en mi habitación.

_
___________ Encendí la luz y no había nada.

_
___________ Apagué la radio y el ruído seguía ahí.

_
Tal vez, pensé, un camión en la calle,
un helicóptero en la azotea, un desfile militar.

_
Salí a la terraza pero no había nada,
aparte de una noche anodina y espesa.

_
Bostecé, sentí un crujido en mi cabeza
y la máquina calló.

_
No volví a pegar ojo en toda la noche
por el miedo a mi propio latido.

_
Los números rojos del techo seguían parpadeando.

_

metronome-animated-gif-14

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Información

Esta entrada fue publicada el septiembre 12, 2016 por en Uncategorized.
Follow Tus ojos, mis manos, y otros desiertos. on WordPress.com

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

Únete a otros 490 suscriptores
A %d blogueros les gusta esto: