—«Hace más de trescientos poemas que no escribo la palabra horizonte. Por algo serás». 'Será', en "Pintura roja y papel de fumar".
Se me han (están) quita(n)do las ganas
de buscar mis libros en las librerías.
Nunca tuve demasiadas, pero
confieso haberlo hecho alguna vez.
Diría, incluso,
que he (estoy) perdi(en)do la obsesión
de arañarle el alma a las guitarras
—excepto cuando mi hija me lo pida:
siempre estaré presto para eso—.
Debe ser la edad,
pero casi no me apetece (nada) leer
lo que escribo, escribir (de) lo que leo,
y ha dejado de importarme si soy bueno.
Es bastante probable que no.
Está bien, supongo:
las tardes se (siguen) escapan(do),
voy a salir a caminar un rato y, con suerte,
igual un día de estos vuelvo a enterrar
mi cabeza en tu pecho.